Lupita,
Hoy cumples 13 años. ¡Ya estás bien grandota! Aquí voy a contarte esas cosas típicas de aquellos viejitos que se creen mucho: Uy, pues que yo me acuerdo cuando naciste. Tu mamá, como bien sabes, estaba enferma y hospitalizada, y tus abuelos y tu padre le hacían compañía. Yo aquí estaba con tus primas y tu hermana cuidándolas. Me acuerdo que hacía más frío del que hace hoy y dispusimos un montón de cobijas en la sala para dormir todas juntitas y llenarnos de calorcito. Nos levantamos temprano, porque tus primas eran unas bebés y las bebés son siempre inquietas. Como yo las cuidaba, estuvimos jugando todo el día, hasta que naciste tú y nos dijeron y queríamos verte.